SÍNDROME DE OJO SECO

¿Sensación de malestar en los ojos?, ¿picor?, ¿irritación?... estos síntomas podrían estar indicándonos una falta de lubricación ocular. 

El síndrome del ojo seco es una consulta muy frecuente en la farmacia comunitaria y que podemos ayudar a aliviarlo.

El síndrome de ojo seco se define como  una alteración que se produce en la superficie de la córnea y de la conjuntiva, por la falta de lágrima o por mala calidad de la misma. Este desorden se produce por una deficiencia o evaporación multifactorial excesiva de la película lagrimal y resulta tanto en síntomas de incomodidad y déficit visual, como en la producción de un daño potencial a la superficie ocular.

Su síntoma principal es la sensación de cuerpo extraño o quemazón, que ocasiona gran malestar, especialmente tras el sueño, lectura o visualización de una pantalla de forma prolongada

ETIOLOGÍA

Además de la edad y el sexo femenino, existen otras causas que contribuyen a este problema y que, de algún modo, podemos intentar evitar o minimizar, como son: 

  • El uso de lentillas que conlleva la  necesidad de utilización de lagrimas artificiales.
  • Ambiente seco, como el derivado de las calefacciones y los aires acondicionados.
  • El uso de pantallas electrónicas. La luz azul afecta mucho a la lubricación de los ojos y además, se produce un envejecimiento de la retina. Esto cobra una gran importancia en nuestros días, en los que la aparición de las nuevas tecnologías hace que cada vez utilicemos más dispositivos como ordenadores, móviles…..y por mas tiempo.
  • Lectura. Uno de nuestros hobbys. El ojo tras leer mucho rato se acomoda y eso exige una mayor lubricacion.
  • Medicamentos. Algunos fármacos, como por ejemplo los utilizados para el acné por vía oral que resecan mucho todas las mucosas incluida la ocular, antidiuréticos, ansiolíticos, entre otros.
  • Presencia de cloro de las piscinas.
  • Exposición solar. Es importante utilizar gorros y gafas solares de buena calidad.
  • Cambios hormonales como menopausia o embarazo pueden agudizar el problema del ojo seco.
  • Tabaco. El humo de los cigarros aumenta la  sequedad ocular y producen picor e irritación.
  • Contaminación de ciudades, industrias de productos químicos.

TRATAMIENTO 

Para este problema de salud la farmacia puede indicar y dispensar lagrimas artificiales, que constituyen la base del tratamiento.

Actualmente coexisten en el mercado distintos dispositivos para su administración. Frascos de colirio multidosis, que contiene conservante para reducir el posible crecimiento de bacterias; o lagrimas en formato en monodosis cuya principal ventaja es la ausencia de conservantes; o envases multidosis con un sistema de filtro que permite su utilización durante más tiempo sin presencia de conservantes. También se pueden encontrar en formato de pomada o de gel, que habitualmente se utilizan por la noche, son mas densos y debido a esa mayor viscosidad pueden dar una visión borrosa durante un periodo corto de tiempo tras su aplicación.

Los activos mas utilizados en la formulación de las lagrimas artificiales son compuestos lubricantes como carmelosa o hidromelosa y también el ácido hialurónico que se utiliza en diferentes concentraciones

La función de estos productos artificiales es sustituir a nuestra lubricación natural, aunque el tratamiento del ojo seco es difícil y muchas veces insatisfactorio, en parte,  por la complejidad de la composición de la lágrima. Cuando se presenta el síndrome de ojo seco, la aplicación de estos productos puede mejorar los síntomas y aliviar este problema. Es importante recordar que la utilización de estos productos debería ser  “de por vida”.

Fuente : Fisterra, Ojo seco (Guía clínica actualizada el 30/05/2016)

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